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Recogiendo la linaza

Linaza sin terminar de limpiar

Ya he recogido la cosecha de lino de este año, mi linaza. Solo falta terminar de limpiarla y para ello tiene que hacer algo de viento, por lo que habrá que esperar.

Cápsulas de cada plantas

Hileras de Linum usitatissimum

El lino se desarrolló bien alcanzando el medio metro de altura. Desde que  floreció se le dieron unos riegos que hicieron que el grano que estaba dentro de la cápsula esférica fuese engordando.

El lino para  recogerlo lo primero que se hizo fue segarlo, tras ello se puso tendido de forma que el sol lo terminase de secar, pues siempre hay tallos que conservan la humedad.  Una vez seco se pisaron los tallos, deshaciendo las cápsulas y abriéndolas. El grano cayó de las mismas y  fue fácil separarlo de las fibras. Estas las he reservado de momento, todavía no se que haré con ellas, pero se ven duras y resistentes.

Como veis en la fotografía el lino está mezclado. Ya lo  sembré junto en una de las hileras y ha terminado mezclándose con todo.  De momento  para el consumo lo voy a conservar así, pero tengo claro que de cara al próximo año para sembrar  seleccionaré solo lino dorado, no por nada especial, sino  porque creo por lo que he leído que es el mejor para el consumo.

Cada cápsula, diez semillas

La producción no ha estado mal. Han sido dos sucos de 0,60 m de ancho por  4,40 m de largo, lo que nos da un total de 2,64 metros cuadrados y hemos sacado a falta de terminar de limpiarlo .

Fibra del lino

Además a la tierra donde lo puse le convenía cultivarse para poder intentar eliminar de ella la grama. ahora es una zona  que  tengo que arar y  abonar, donde posiblemente  plante fresas, para renovar las que tengo ahora  plantadas, que ya tienen casi tres años.

Semillas de lino que incorporaremos a la dieta, beneficiándose de ellas panes y otros preparados. Unas semillas en las que todo el proceso de producción de las mismas es ecológico  y además todavía falta  por ver que podemos hacer con los tallos ¿Quién da más? ©

Orégano de cosecha propia

Manojos de Origanum vulgare

Comenzando a abrir la flor

Ya tengo secando la cosecha de orégano de este año. Es bueno tener orégano suficiente como para poder emplearlo con alegría  tanto con la cocina  (nos encanta tanto en la pizza como en las truchas marinada en orégano y aceite y a la brasa,…) como  para emplearlo allá en el invierno cuando tengo bien cogido un catarrazo, mezclándololo con otras hierbas y tomarlo a discreción. Ya os contaré mi receta cuando se acerque el invierno.

Cuajadas de flor

Lo suelo secar en el ático, con las ventanas del tejado bien  abiertas, a modo de una gran  chimenea  que ayuda a  equilibrar y renovar la temperatura del interior, creando corrientes de ascenso,  de renovación del aire de la vivienda. Allí a la sombra están esta y otras hierbas a lo largo del verano.

El orégano este año sigue en el mismo lugar que el año pasado junto al manzano Golden y una mata de azucenas blancas, pero he ampliado con una nueva mata hacia otra zona del huerto

Junto al manzano…

…cuajado de flor

El lugar es el mismo, pero la planta ya no se parece nada a lo que comenzó, cada vez ocupa más espacio y se encuentra mejor.  No ha crecido en exceso, pues aunque aboné el manzano he procurado no echar demasiado cerca del orégano para aumentar su aroma. Tallos de cerca de 50 cm los más altos y sobre todo cuajados de flor, pues el orégano ha florecido muy bien.

Siempre da un poco de pena cortar los tallos en plena floración. Una pena y un privilegio  poder hundir la nariz en el brazado de  tallos olorosos de  una  profundidad  envolvente,  con  esta fragancia   intensamente aromática y un tanto picante. ©

¡A la carrera!

Panorama general de la zona de la valla este

Regando antes de arrancar las acelgas para trasplantar y luego cavar

El huerto en mayo se convierte en una auténtica carrera,  y esto no es una expresión metáforica, sino real. Las plantas inician un feroz desarrollo y a uno en el huerto nunca le llega el tiempo, máxime cuando  las temperaturas pegan estos saltos y hay que regar como si estuviésemos en julio. No hay forma de poder hacer todas las tareas que de un día para otro se acumulan.

Hay que cortar las hierba que está comenzando a granarse y si se deja será peor, pues se multiplicarán  las potenciales semillas que nacerán y habrá que controlar, por ello hoces, güadañas y desbrozadoras a mayor escala, son una auténtica ayuda.

Hay que desherbar los diferentes cultivos y semilleros, pues las hierbas entran en competencia con los cultivos   disminuyendo su desarrollo y en ocasiones son alojamiento de diferentes plagas

Fumaria creciendo entre las fresas trasplantadas

Hay que abrir los sucos de los diferentes cultivos como ya hemos explicado hace unos días.

Abriendo los sucos al maíz

Hay que terminar de sembrar, pues cuanto más se deja más dificultad tendran las semillas para nacer, teniendo que controlar y mantener la humedad de los semilleros y menos tiempo tendrán las plantas en su desarrollo, y hay que hacerlo de forma que las posible heladas no nos pillen, lo que este año será difícil que ya suceda, pero nunca del todo imposible,

Hay que  decidir si poner o no poner ya al exterior las solanáceas y otros cultivos,  jugando con las fechas, y arriesgando en el juego.

Hay que vigilar las plagas, pues con la subida de las temperaturas estas se desbordan por el huerto e invaden diversos cultivos, fundamentalmente el pulgón, pero  no es la única, hay otras.

Hay que emplear con alegría y generosidad el Caldo Bordelés y el azúfre, pues  humedad y  temperatura altas son el caldo de cultivo ideal para el desarrollo de todo tipo de hongos, y la difusión de sus esporas, por lo que hay controlar  y minimizar su impacto.

Patatas con necesidad de ser cavadas y desherbadas

Comienzan las frutillas (fresas) y redes y sistemas de protección son necesarios en cuanto los pájaros descubren que ya hay frutos.

Hay que poner tutores para guisantes y judías, tomates, …

Hay que recoger el final de las cosechas de invierno ( puerros, remolachas, espinacas, acelgas,…) y comenzar a recoger los de primavera ( lechugas, cebolleta tierna, guisantes, fresas, …)

Y si además de ello a uno le  aumentan las tareas de fuera del huerto  o falta por alguna causa unos días  al mismo  de pronto se encuentra  con que  todo se ha desdoblado  pero no solo   por que  por  un lado las plantas crecen de  forma agigantada sino que por otro todo está necesitando cuidados sin parar. ©

Esplendor de las Aquilegias

Cultivando berro de jardín

Lepidium sativum

Escribimos ahora sobre una planta  ya   cultivada ya por lo egipcios y de la que Plinio nos dejó noticias, un cultivo propio de final del invierno y  comienzos de la primavera  y que hoy en día puede cultivarse casi en cualquier momento, que se desarrolla en poco tiempo siempre que se coloque en un lugar  relativamente cálido y húmedo que es el berro de jardín o en concreto el Lepidium sativum aunque corrientemente también  llamado Mastuerzo.

Mastuerzo naciendo

Es una planta de la familia de las crucíferas que presenta unas necesidades altas de un buen abono y de un riego regular, ante la falta del mismo la planta tiende a salirse, por lo que es conveniente si se quiere  emplear en ensaladas regarlo con regularidad.

Es una planta rica en vitamina C que se suele emplear en las ensaladas primaverales  como depurativa, razón por la que se suele cultivar en cualquier parte del mundo hoy en día.

Mastuerzo creciendo

Para sembrarla lo primero de todo es cavar la zona donde pretendamos sembrarla, posteriormente lo  mejor es poner una base de abono, que en nuestro caso ha sido  de humus, encima hemos colocado las finas semillas del Mastuerzo  y por encima le hemos echado una fina capa de arena, para que las semillas no se viesen arrastradas por el agua y se amontonasen.

Mastuerzo en crecimiento, ya válido para ser consumido

Nosotros lo hemos puesto sembrado bajo el  túnel  y ha sido la primera en aparecer de todas las semillas colocadas en el mismo, a los pocos días ya mostraba sus hojas y desde ese momento no ha parado de crecer. Ahora ya lo estoy arrancando para las ensaladas y la intención es resembrar otras pocas semillas para seguirla echando a las ensaladas

Nabitos y berros de jardín creciendo juntos

La intención es también el sembrar unas pocas al aire libre,  más separadas con la intención de que las plantas alcancen su altura definitiva (30-50 cm) y granen, tanto por las semillas en si como por experimentar, pues es una de las semillas que se pueden emplear en la elaboración de  mostaza y también poseen cualidades medicinales. ©

Arrancados para el consumo

Sparaxis tricolor o Arlequina

Sparaxis tricolor

Sparaxis tricolor es el nombre de otra  bulbosa  de origen sudafricano que he comprado,  pertenece a la familia de las Iridaceae y  se puede desarrollar como bulbosa de  plantación otoñal o de plantación primaveral dependiendo del clima del lugar. En aquellos lugares de clima frío es mejor plantar los bulbos en primavera, tras un cuidadoso almacenamiento invernal, pues resulta por lo visto una planta sensible a las heladas.

Bulbos dentro de su envase

Su denominación tricolor es consecuencia de los tres colores que suelen ser habituales en la misma planta  (amarillo interior, mancha oscura alrededor  pero el color exterior de los tépalos cambia entre ellas)  debiéndose colocar en una exposición de  pelo sol a media sombra. La propagación se realiza por  los pequeños  cornos y semillas.

Nosotros hemos aprovechado  ahora las  bulbosas de primavera  del Lidl para poner esta planta en uno de los laterales del huerto.  La hemos repartido en   diversos lugares, hemos cavado un poco, mezclando la tierra con algo de humus y solo resta   después cubrir con tierra, regar y esperar.

Bulbos antes de poner en tierra

Los bulbitos  los he colocado  separados como  unos 5 cm y a una profundidad de 8 o 10 cm, agrupados en  grupos de 12-15 piezas. La planta crece en torno a unos 30 cm.  Los he colocado en  zonas  que  presentan un fácil drenaje, pues los Iris en general   no gustan de encharcamientos. Iremos siguiendo las plantas a lo largo de su crecimiento para documentar su evolución. ©

La hierba en el huerto


Crecimiento incontrolado

Gramíneas

Este año con las múltiples lluvias que se han venido desarrollando a lo largo del invierno y primavera el crecimiento de la vegetación natural está siendo excepcional, tal es así que se podría decir que es un año de hierba.

En un año de este tipo  segadoras, desbrozadoras y para los más tradicionales guadañas, resultan ser una de las herramientas más imprescindibles.

Llanten menor

Siendo la  vegetación natural que rodea el huerto  muy abundante todavía. Esta vegetación en pleno mes de mayo se desborda. En ella nos podemos encontrar todo tipo de plantas: gramíneas, compuestas, plantagináceas,   variedades de cardos, leguminosas,…. Plantas que están en el proceso reproductivo a plena dedicación

Trébol rojo

Todas ellas  bordean  el huerto y  quizá en algún momento haya que realizar un estudio individualizado sobre algunas de estas plantas, pero de momento son solo un espacio en los alrededores del huerto que hay que controlar. Es imprescindible cortar la hierba antes que esta  desarrolle sus semillas pues sus posibilidades reproductoras   se multiplicaran si no es así, con lo que nos encontraremos con mucho más trabajo.

Pero no es solo en los alrededores de la huerta donde la vegetación natural se está desbordando, en los mismos caballones y en los campos de cultivos las pequeñas hierbas nacidas junto a patatas o lechugas se convertirá en un problema si se lo permitimos llegando a ahorrar las plantas con su fervor de crecimiento.

Familia de las compuestas

Necesitamos entonces manejar el zacho y en los días de sol realizar una cava ligera eliminando todas estas plantas que dejadas sobre las superficie o llevadas al montón de compost se convertirán en abono antes que en un problema.

Crisantemos antes de la escarda

Después de ella

Creemos  que en el uso de herbicidas no es la respuesta  adecuada como sistema de control del crecimiento y desarrollo de las hierbas, pues el entorno es un ecosistema  que debemos respetar, hay  pues que buscar otras alternativas .

Equinacea tras la escarda

Equinacea invadida por plántulas de hierbas

Algunas de ellas puede ser: segar y cavar las hierbas, y emplear las mismas para secas como alimento de los herbívoros o bien si no se puede hacer otro tipo de aprovechamiento de ellas echarlas al montón  de  compost , pues después de descompuestas crean un buen mantillo vegetal, o en seco antes de que tengas semillas, como acolchado o cobertura para ahorrar agua a lo largo del verano. También podemos hacer experimentos de solarización de las mismas con plástico  pero yo de momento todavía no le encuentro el truco, pero tendré que ponerme en serio  e investigarlo bien. ©