Archivo de la categoría: Estanque

Va de experimentos

Arroz a comienzos de octubre

Arroz a comienzos de octubre

Ahora que se acerca el final del año nos queda pasar cuenta de cómo han ido algunos de los experimentos que hemos realizado a lo largo del año. De algunos ya sabéis sus resultados, de otros, quizá no conozcáis   en qué han consistido y cómo han ido. Aquí está la relación de los más destacados:

Cosecha de melones

Cosecha de melones

  • Arroz. Ni el sembrado directamente, ni el trasplantado han ido bien.  Crecieron florecieron, pero pese a que hubo espiga esta no llegó a granar. No sé si se debe a que no se alcanzan temperaturas adecuadas, pese a la suavidad del año, o a que le falta algún tipo de nutriente y no he sabido hacerlo mejor. Volveré a intentarlo al próximo año por darle una última oportunidad antes de tirar la toalla.
    Arroz con la espiga helada

    Arroz con la espiga helada

    Soja tardía

    Soja tardía

  • Injerto de castaño sobre encina. Han sido un completo fracaso. Ninguno de los injertos realizados salió adelante. Este año volveremos a intentarlo, adoptando algunas medidas nuevas, arbolitos de menor tamaño y  un tipo diferente de injerto,  para ver si conseguimos que alguno  llegue a prender, pero creo que pondré mientras tanto un castaño a ver si cuidándolo un poco llega a crecer.
  • Pimientos Bishops Crown.  Sembrados al mismo tiempo que los demás es un pimiento de crecimiento más lento por estas zonas, tanto es así que les costó madurar, y solo alguno llegó a hacerlo, por lo que el tema de las semillas está todavía en el aire. Aunque tengo unas plantas del año pasado, por lo que ya veremos que sucede con ellos.
  • Consuelda rusa.  Las plantas colocadas en el huerto han sido 4 y todas ellas están en buenas condiciones, lo que nos permitirá al próximo año  comenzar a usarla en el compost y experimentar con sus posibilidades.
  • Tencas. A lo largo del verano las tencas han ido creciendo en la charca. Al principio tímidas y retraídas, pero pronto se animaron y se han ido desarrollando de forma clara.
  • Melones y sandías bajo túnel. Este ha sido uno de los experimentos que mejor han funcionado este año. Pese a que la siembra fue tardía comenzaron a dar pronto y se mantuvieron dando durante mucho tiempo. El próximo año lo volveremos a repetir, pero secuenciando su siembra desde antes.

    Pimientos Bishop´s crown

    Pimientos Bishop´s crown

  • Cultivos tardíos de maíz, patatas  y soja.  El resultado de la siembra tardía ha sido irregular, en gran medida beneficiado por la suavidad de temperaturas de los inicios de este otoño.
    • En el caso de las patatas puestas en surco cubiertos de paja, los resultados fueron buenos. Hay que aumentar las cantidades de paja pues  algunas de las patatas se ponen verdes de la solanina, pero por otro lado esas son las que reservamos para la siembra, pues dicen que funcionan mejor ante el ataque de virus y hongos.
    • Respecto al maíz, lo más tardía le costó granar.  aunque llegó a hacerlo los granos no alcanzaron sus mejores resultados. Tan tarde no compensa. Hablamos que alguno se sembró a finales de junio.
    • Respecto a la soja, pese a ir tarde,  creció bien, produjo edamame y llego a madurar, pero para secarse la he tenido colgando dentro de uno de los invernaderos. ©

      Recogiendo patata tardía

      Recogiendo patata tardía

 

 

 

Un rincón a la sombra

Vista general del estanque

Vista general del estanque

No hay mucho tiempo libre en el huerto en esta época, sobre todo en los días de calor. Entre unas cosas y otras la tarea se extiende casi hasta el infinito, nunca se acaba: regar,  quitar hierbas, volver a regar, atar los tomates, recoger  judías, regar, preparar el terreno para los cultivos de invierno,  recoger calabacines y pepinillos, atar las judías trepadoras,  poner semilleros, regar,  dar purines, poner a fermentar cebolla, tomate, ortiga, caléndula, volver a regar, sacar patatas, recoger pimientos,  poner restos vegetales para el compost,  regar,….

A la sombra

A la sombra

En medio de toda esta maraña de tareas hay un espacio en el huerto que se escapa  de tanta actividad y se deleita en el sosiego y en la calma. Un lugar donde se contempla el lento discurrir de los peces  en el agua, el vuelo de las libélulas, la apertura de la flor de los  nenúfares. Este rincón a la sombra tiene un toque de magia a ciertas horas en el huerto.

Visto desde el otro lateral

Visto desde el otro lateral

Creado en la zona sureste del estanque,  por la sombra  de un grupo de los anteriores chopos que han rebrotado allí con la presencia del agua cerca. A los que se han unido otros arbustos colocados cerca, un mimbrero, un hibisco y un peral de perucos, que ofrecen en este tiempo unos pocos  frutos maduros.

Luz y sombra en el agua

Luz y sombra en el agua

Esta zona en la mañana se convierten en el punto de mayor frescor del huerto, manteniendo esa característica hasta que el sol va volviéndose hacia el noroeste ya en la tarde. En esta zona  que tiene  unos centímetros por encima de la altura media de su entorno,  junto al frescor del agua  y el movimiento de las hojas de los chopos,   se mantiene  de forma casi interrumpida un  fluir del aire que crea ese microclima especial, que lo hace el lugar especial para el descanso, para recuperar fuerzas durante un rato. ©peces

Flores en torno al estanque: rosas, iris , calas,…

Acoro bastardo en flor

Acoro bastardo en flor

El estanque es día tras día una fuente de placer en el huerto. Al mantener  la tierra un nivel de humedad más alto, muchas plantas adquieren a su alrededor  el momento de mayor esplendor. En estos momentos son las rosas las que se encuentran en esa situación.

Muchas rosas

Muchas rosas, …

Rosas de olor junto a las Brodiaea Queen Fabiola

Rosas de olor junto a las Brodiaea Queen Fabiola

Kniphofia uvaria

Kniphofia uvaria

Rosas rojas, rosa, fucsia, … que aprovechando la fortaleza que la humedad de la tierra les aporta están creciendo con fuerza y alegría. Solo dejaros algunas imágenes, pero no son las únicas, antes que ellas  el acoro bastardo lo ha hecho intensamente, pese a que he eliminado más de la mitad de la mata.

Más del triple ha crecido este año la Kniphofia uvaria, que ha sacado sus erguidas flores dando color al estanque durante muchos días con su abundante floración.

También las Calas están en flor. Las blancas lo hacen desde hace tiempo y las de colores comienzan a abrirse ahora.  Es un buen momento para disfrutar de ellas, aunque algunas flores dada la intensidad del calor, tendrán una belleza efímera.

Calas de colores

Calas de colores

en diferentes tonos de amarillo

en diferentes tonos de amarillo

Calas blancas

Calas blancas

Quizá os preguntéis si compensa, si merece la pena dedicar tiempo y atención  a esta belleza evanescente, pero esta es una afirmación categórica: lo hace.  Sin mencionar todas sus utilidades prácticas que en muchos casos las hay. Las flores del huerto convierten este espacio en una zona suntuosa,  en un premio para los sentidos. Solo el mero  hecho de poder contemplar tanta  belleza, merece  la pena.©

Rosas rosa

Rosas rosa

La construción de bancales en el huerto

Zona de los bancales en septiembre

Zona de los bancales en septiembre

Uno de los proyectos que he ido realizando este verano y del que no os  he hablado hasta ahora  ha sido la transformación de la parte que está por encima del estanque, colocando una serie de bancales a lo largo de toda esta zona.

Inicio en mayo

Inicio en mayo

Ya desde la creación del estanque toda esta zona había quedado con un suelo  mucho más pesado, por el uso de la miniexcavadora para la colocación del mismo. Aunque el cultivo de la zona había mejorado el terreno, no terminaba de estar bien, por ello decidimos emplear la misma mini-excavadora y retirar una buena parte de la tierra y, desde ahí, ir montando los caballones.

Regando en junio antes de plantar

Regando en junio antes de plantar

El primer paso en el proceso era decidir en qué sentido queríamos orientarlos.  El sentido común nos decía que lo mejor era colocarlos en sentido norte- sur, para asegurar la luz de forma regular a casi todas las plantas. Pero con ello se bloqueaba el paso  hacia el estanque, obligando  a colocar dos zona de acceso en cada extremo, pero además hay una ligera pendiente desde la zona sur más alta, por donde va el agua, y el resto, lo que dificultaba el acceso.

Plantando y acolchando en julio

Plantando y acolchando en julio

Seguíamos adelante en Julio

Seguíamos adelante en Julio

Al final nos decidimos por una orientación este-oeste. Esta orientación ofrecía  la ventaja de articular mejor todo el espacio entorno al agua haciendo más fluido el intercambio entre espacios. Además  de facilitar el trabajo de construcción de los bancales, que se realizaría entrando y montando los bancales de uno en uno, desde la zona oeste.

A finales de julio

A finales de julio

Restos de madera para el interior del bancal

Restos de madera para el interior del bancal

Para elaborar los bancales me planteé usar en parte las técnicas desarrolladas en los bancales   Hugelkultur, que emplean madera en el interior del bancal, bajo la tierra,  que en el proceso de descomposición  se convierte en una esponja que retiene la humedad y en ese mismo proceso aportan nutrientes a las plantas.

Comienzos de agosto

Comienzos de agosto

Algunos de los troncos

Algunos de los troncos

Para ello empleamos materiales de poda, restos vegetales y sobre todo algunos troncos de chopos, que procedentes de la antigua chopera quedaban todavía en el huerto. Colocamos los troncos, en unos casos longitudinalmente, en otros de forma trasversal y luego los cubrimos con tierra por encima.

Avanzando en agosto

Avanzando en agosto

La nivelación de cada bancal  fue el siguiente paso. Las plantas se fueron colocando de forma progresiva a lo largo del verano, con cultivos que en unos casos ya se han ido consumiendo y en otros son cultivos de otoño e invierno. La intención es la de mantener siempre   la tierra  cubierta con paja y restos vegetales. ©

Nenúfares en el estanque

Nenúfar europeo

Nenúfar europeo: Nymphaea

Abriendo el embalaje

Abriendo el embalaje

¡Son casi mágicos! Meciéndose  suavemente sobre el agua. Los Nenúfares europeos  son una de las plantas  con la que queríamos contar en el estanque  del huerto. Para  conseguirlos  nos dedicamos a buscar en la red un proveedor.  Al final  lo encontramos y a buen precio, decidimos comprar nenúfares de dos tipos: blanco y rojo.

Las plantas llegaron en pleno verano preparadas para evitar la perdida de humedad. En cuanto las recibimos  nos pusimos a la tarea de introducirlas en el estanque, eliminando los restos de lenteja acuática que las acompañaban.

Flotando en el agua

Flotando en el agua

Cesta con arpillera y grava en el fondo

Cesta con arpillera y grava en el fondo

Ya teníamos las cestas preparadas para colocar las raíces, dentro de cada cesta colocamos una tela de arpillera que ayudara a retener la tierra y el abono  a base de humus y un abono especial para nenúfares de liberación lenta, que serviría de sustrato a partir del cual desarrollarse.  Luego la tierra. Por encima de todo colocamos arena y piedras, lo que impediría a la tierra flotar al empapar el sustrato y a las carpas remover el contenido, desmontando el conjunto.

Tapando con arena y piedras la tierra

Tapando con arena y piedras la tierra

Colocados en una orilla

Colocados en una orilla

Las plantas  estaban en muy buenas condiciones aunque  tenían muy poco desarrollo de sus hojas, por ello comenzamos  colocando  las cestas  a poca profundidad, cerca de la orilla y con solo unos veinte centímetros de agua por encima.

Cuando desde el centro de la roseta comenzaron a sacar los tallos  enrollados de las futuras hojas flotantes decidimos llevarlos a aguas más profundas, a su emplazamiento definitivo. Son Nenúfares europeos capaces de aguantar las bajas temperaturas del invierno, bajo la superficie del agua. En este emplazamiento estarán a lo largo de todo el próximo año.

Desarrollando nuevos tallos

Desarrollando nuevos tallos

En este lugar las plantas  adquirirán  la altura necesaria para  flotar sobre el agua. Hasta ahora están creciendo bien, y rápido y aunque eran diferentes en su nivel de partida, ambos se mecen ahora en el agua aumentando la belleza del estanque.

Creciendo

Creciendo

Nos falta esperar que sigan  tan buen desarrollo y el próximo año tengan flores. ¡Un espectáculo cuando las Ninfeas en flor se mezan en el agua! ©

¡Cada vez falta menos!

¡Cada vez falta menos!

Plantas del estanque

Estanque con algas en suspensión

Estanque con algas en suspensión como el Ceratophyllum demersum

...

Potamogeton natans

Tener un estanque es un mundo nuevo,  una puerta abierta a otro sector importante de la vida vegetal, la vida acuática. Todo un mundo de posibilidades  con un objetivo: Crear un espacio acuático autónomo, donde la variedad y diversidad de  plantas que lo pueblan  permitan mantener un medio equilibrado y sano.

Con esta declaración ya hemos establecido una serie de premisas que nos resultan importantes  al crear  y mantener el estanque: Autonomía, equilibrio natural, riqueza de la biodiversidad,  salud del biotopo, …

Antes de  llenar de plantas el estanque teníamos claro que buscábamos diseñar un espacio lo más natural posible, cercano a las especies que pudiera haber  en el entorno natural  de las charcas de la zona que nos rodea.

Calas, Iris y otras acuáticas en los márgenes

Calas, Iris y otras acuáticas en los márgenes

planta

Platanaria o Sparganium  erectum

Al diseñar el estanque ya habíamos previsto  espacios  de acuerdo a las diferentes necesidades de las plantas. Desde zonas para colocar algunos tiestos sumergidos a diferentes niveles, así como algunos  espacios inundables, con áreas cerca de las orillas para colocar tiestos, y otros donde se podían asentar plantas directamente en tierra, aquellas   que gustan de estar permanentemente encharcadas. Así como puntos  en el margen de los borde del  estanque que al llegar al máximo de su capacidad de agua, se  desbordan regando las áreas del entorno del mismo.

Al poblar  el estanque queríamos hacer una transición progresiva de especies que iría desde las plantas del huerto, pasando por las de borde del estanque, gustosas de vivir cerca del agua, a aquellas que hay en el  margen, y en ocasiones inundable borde del agua,   hasta las que viven  dentro del agua, desde el fondo del estanque hasta las que emergen en su superficie.

sss

Alisma plantago

El conseguir variedad de plantas para el estanque ha seguido diferentes pautas:

  • Desde tomar algunas plantas de   otro  estanque que tenemos en  el huerto del pueblo.
  • Hacer espacio en las orillas a plantas existentes en el entorno  húmedo del huerto, en concreto en  la acequia de riego.
  • Tomar  otras de espacios diversos: humedales, bordes de acequias,.. donde era factible hacerse con ellas  por no ser un espacio protegido, sin provocar daños en el medio.
  • En algunos casos comprar aquellas especies más difíciles de conseguir, raras, o estéticamente más atractivas.
Nenúfar recien introducido en el estanque

Nymphaea alba o Nenúfar rojo recién introducido en el estanque

Al plantar estas en el estanque siempre  ha sido en un número reducido de ejemplares ( dos o tres especímenes de cada planta). Lo que se busca es se multipliquen progresivamente en el entorno donde se han colocado. ©

Juncos y nenúfar

Juncus conglomeratus o junco y Nymphaea alba o Nenúfar blanco

Para orientarnos sobre el montaje del estanque y el tipo de vida vegetal posible en este entorno hemos tomado de referencia el libro: Bricolaje De Jardineria (Enci. De Jardineria) Editorial Susaeta

Piedras en el estanque I

Estanque

Estanque

Para la realización del estanque  la tierra arcillosa y los cantos rodados que aparecen en el huerto nos han sido   muy útiles, pero ahora para rematar el mismo se ha hecho  necesario  el  emplear otros materiales, en concreto piedras naturales.

Zona de entrada del agua

Zona de entrada del agua

Tallando la canaleta de  piedra

Tallando la canaleta de piedra

Son piedras que no aparecen en este entorno y  que ha habido  que traer al huerto. Lo que estamos  haciendo poco a poco, desde nuestro otro  huerto en el pueblo. Esta es la razón  por la que  una parte del  material que estamos empleando no tiene nada que ver con la geología de  esta zona, sino con los gneis de «ollo de sapo», que son tan frecuentes en las paredes de los cercamientos o cortinas de  la Sierra de la Culebra.

... que poco a poco se coloniza de plantas

… que poco a poco se coloniza de plantas

Con el material en el huerto, traído poco a poco, hemos ido rematando los alrededores del estanque, consolidando este y respondiendo a las necesidades del mismo.  La tarea no se ha realizado de una tacada, sino cuando se ha  ido teniendo tiempo, y todavía seguimos en ello. El diseñador  y principal artífice del mismo es  mi hijo mayor.

Pasarela lateral

Pasarela lateral

Varios aspectos se han tenido en cuenta  en lo que hemos realizado hasta ahora en  las orillas.

Escalón lateral a modo de jardinera

Escalón lateral a modo de jardinera

  1. Rematar y ampliar uno de los laterales, junto a la valla,  que quedaba como una zona de paso muy estrecha. Al tiempo que se elevaba un poco el perfil de esta área. Se han colocado también  unos peldaños para acceder al estanque desde ese lateral.
  2. Se ha preparado el punto donde el agua del canal accede al estanque de modo que no remueva la tierra a su alrededor y caiga oxigenando el agua del estanque. Se ha aportado un cierto toque zen en el diseño.
  3. Así como el aliviadero para cuando entra más agua de la necesaria, poder evacuar la misma.
  4. Se han preparado puntos de acceso a la orilla del estanque con una doble función: poder recoger agua sin que las ondas que se  forman alteren las orillas y que sirvan de mirador hacia el estanque pues a todos nos gusta la contemplación de la vida en el interior del mismo y de las carpas cundo se acercan a comer.
  5. Colocar cantos rodados por el borde inundable del estanque para que las carpas no nos  levante todas las orillas
  6. Crear   un borde   de piedra que delimite el  área  exterior en uno de los laterales del estanque, a modo de  jardín.
Zona de carga de agua y acceso al estanque

Piedra en el borde

Pero la tarea sigue en marcha hasta completar todo el perímetro, aunque algunas de las tareas tendrán que esperar al invierno y al parón vegetativo  que llegará, pues implican cambios de sitio de  algunas plantas. ©

Carpas Koi en el estanque

En superficie

En superficie

Desde que está tan lleno el estanque su superficie se convierte un lugar de calma. Por encima  casi no se ve vida  pues las ranas se esconden  en cuanto nos oyen, pero bajo el agua hay más actividad y de vez en cuando se  ve la sombra de algún pez, que  los hay.

Flotando en un pequeña pecera, dentro del agua

Flotando en una pequeña pecera, dentro del agua

En el estanque se encuentran las carpas que estuvimos trasladando cuando lo vaciamos.  Carpas koi. Pertenecen a la familia de los ciprínidos y son  variedades de color más intenso de la carpa común o Cyprinus carpio. Mi hijo las adquirió  el año pasado cuando apenas tenían unos centímetros. Las  echamos dentro del estanque en  el verano. Solo las  vimos los primeros días  y después se  dejaron  de ver.

Al poco de soltarlas

Al poco de soltarlas

Durante todo el tiempo  estuvimos seguros de que algún tipo de bicho se las había comido. las opciones eran  garzas y visones, pues todas las mañanas del verano nos encontrábamos el agua toldada y revuelta  al llegar.

Trasladando la carpa naranja a un  deposito , mientras vaciamos el estanque

Trasladando la carpa naranja a un deposito , mientras vaciamos el estanque

Al vaciar el estanque una de las grandes expectativas era averiguar  qué había sucedido con ellas y ya desde  que se redujo el volumen de agua quedó claro que estaban y eran de gran tamaño, habían crecido un montón.

Con la blanca

Con la blanca

Estas dos carpas son  los  únicos animales  que de forma consciente se han colocado en el estanque. El resto ha ido llegando solo. Se supone que son carpas domésticas: Una en blanco con manchas rojas. la otra en un intenso tono naranja.

Con menor color por el estrés

Con menor color por el estrés

Al realizar el vaciado sufrieron algo de estrés, que hizo que su color al volverlas al estanque no fuese tan intenso. Las carpas Koi se alimentan de todo tipo de animales acuáticos que llega hasta ellas. Sin duda los abundantes renacuajos que ahora hay en el agua, forman parte de esa dieta.

Soltándola en el agua

Soltándola en el agua

Sin duda son animales resistentes, pues el volumen de agua de este año ha sido más bien escaso y ellas estaban muy saludables, se resistían con energía y eran de muy buen tamaño.

El recorrer el perímetro del estanque se llena siempre de las expectativas de poderlas ver. Lo bueno sería que incluso pudieran aumentar.  No  sabemos si será posible,  pero estaremos atento a la posibilidad de que se reproduzcan. ©

Renovación del estanque (IV): Remates finales

Rematando laterales

Rematando laterales desde su ladera norte

Angulo lateral, antes de cubrir con tierra

Angulo lateral, antes de cubrir con tierra

Una vez relleno de agua el estanque,  la lona fue ajustándose  a su alrededor y fue cuando fuimos conscientes de que habíamos calculado bastante bien el material comprado, pues solo en sus ángulos se podía decir que sobraba algo de material, y en esas zonas había dos soluciones:

  • O lo cortábamos, dejándolo solo con el  borde  de material necesario para que se elevase la altura exterior al nivel requerido.
  • O bien  podíamos ampliar el ángulo y colocar una zona rebajada  para colocar dentro tierra y  plantas que necesitasen de la humedad para su desarrollo, por lo que al quedar la zona encharcada al regar, podrían tener un buen desarrollo a lo largo del verano.
Comenzando a rematar la arqueta

Comenzando  el forjado de  la arqueta

Subiendo laterales

Subiendo laterales

Arqueta rematada

Arqueta rematada

Optamos por las dos opciones en la zona del oeste respetamos el material y colocamos dos superficies de plantación para plantas  semiacuáticas. En la zona este redondeamos y rematamos  el material, arreglando uno de las zonas para colocar el aliviadero.

Barro, lona y cemento

Barro, lona y cemento

El punto de mayor riesgo del embalse es la arqueta de riego, que tiene la misión de poder enganchar una goma para canalizar el agua a las zonas de cultivo sin tener que llevarla guiada por el suelo.  La entrada de la arqueta se dejo  al nivel de la misma, pero se elevaron los laterales, de modo que hubiera un margen de unos 10 cm, de rellenado con el que poder jugar mientras se va regando.

Borde sur

Borde sur

Lateral oeste

Lateral oeste

La goma tiene la presión de la columna de agua de desnivel que se genera,  por lo que se puede regar bien cualquier parte del huerto incluso la que está en  la zona por donde entra agua al  estanque.

La conexión entre la arqueta de riego y la lona yo pretendía realizarla con  cemento, pero mi hijo que es el que lo ha realizado ha impuesto su criterio y el empalme la sella meramente con arcilla, que de momento parece funcionar bastante bien. No hay fugas.

Por debajo de la lona se fue colocando un nivel de tierra cribada, para impedir que la presencia de piedras   pudieran romper el material. Por encima se colocó  tierra también menuda y suelta y se niveló todo el conjunto.

Rebosadero

Rebosadero

Todavía hay zonas del área de contacto entre la tierra y el agua que están sin rematar e introducir tierra, pero lo iremos realizando conforme pensemos que plantas queremos colocar ahí.

Zona norte y noreste

Zona norte y noreste

En el estanque el agua  cada vez aparece más clara, pues el barro en suspensión se ha ido depositando en el fondo y de vez en cuando podemos ver a los peces que se pasean bajo la superficie.©

Se puede comenzar a poblar

Se puede comenzar a poblar

 

 

Las ranas

Ranas

Ranas y renacuajos

Bidón con algas, ranas y caracoles

Bidón con algas, ranas y caracoles

En esta tarea de renovar el estanque, las ranas han sido una de las especies más abundantes con las que nos hemos encontrado. Hay que ver cómo, desde una pareja de ranas que a saber de dónde vinieron, estas se han multiplicado. Tanto que son una de las  base más  importante dentro de la cadena alimentaria de la charca, tanto ellas como los renacuajos.

ranas 1Las ranas vivían felices antes del cambio, calientes junto al plástico  que las envolvía. Pero ahora están recelosas, en los últimos tiempos no hay forma de acercarse a ellas. A nada que uno se acerque ellas saltan rápidamente.

Entre estas dos actitudes las ranas padecieron el trauma del cambio, que de momento las ha dejado muy suspicaces.

Primero sometimos a ranas y renacuajos al proceso de captura,  al comienzo  en el agua, pero más adelante entre el fango. Creemos haberlas recogido todas, pero sin duda no les gustó. Luego las dejamos  junto a las algas y los caracoles hasta que recompusimos su hábitat lo suficiente para devolverlas al mismo.

Renacuajos

Renacuajos

De cerca

De cerca

Tras aclararse el agua comenzaron a ser visibles siempre que nos acercamos, o a dar  saltos impresionantes hacia el agua desde las orillas. Al limpiar el estanque se ha reducido el volumen de  vida  que almacenaba y ahora para ellas resulta  imprescindible el completar su alimentación con los animales que rodean la charca.

A la caída de la tarde las ranas comienzan a cantar contentas en la charca, su croar se oye desde todas las zonas del huerto. El volumen del agua se ha incrementado exponencialmente y  podrán reproducirse más  si así lo desean. Las puestas de huevos comienzan a flotar en el agua. Sus posibilidades  de completar con éxito la reproducción también, pues ya pueden recorrer en la noche todo el huerto ampliando   el suministro de alimento  que tienen a su disposición.©

Estanque bajo el sol

Estanque bajo el sol