Una buena cosecha de patatas Vitelotte ha sido la recolectada esta semana. Las plantas sembradas al mismo tiempo que las patatas Kennebec resultaron mucho más tardías que estas. Han tenido un ciclo de desarrollo mucho más largo, manteniéndose mucho más tiempo en flor, con mucha más rama y conservando el vigor de la hoja hasta ahora mediado el otoño.
Hemos esperado a que las ramas perdiesen las hojas, para extraerlas, sin idea de cómo podría resultar la cosecha, esperando que esta fuese abundante dada la abundante rama. Así ha sido.
Las hemos recolectado en uno de los interludios entre las lluvias de esta semana. La tierra estaba bastante blanda y fácil de extraer, y aunque al salir algunas de las patatas tenían tierra pegada, esto no me preocupaba pues tenía intención de lavarlas al acabar de extraerlas.
Para extraerlas hemos empleado la laya, y las hemos dejado colocadas cobre la tierra procurando dañarlas lo menos posible pues el año pasado hubo dificultades en su proceso de conservación.
Al arrancarlas en alguna ocasión hemos encontrado y matado escarabajos de las patatas que como ya había dicho en una entrada anterior aparecieron de forma significativa en el mes de septiembre , cerca del final de ciclo de esta patata, mientras que en la patata tardía no ha habido ninguno. No nos interesa que queden invernando para la primavera.
Como veis cada pie de patatas tenía un número elevado de patatas, aunque eran numerosas las de tamaño medio y pequeño (hecho bastante frecuente en esta variedad de patatas). Con todo de 12 patatas sembradas, nos hemos hecho con una taleguita decente de patatas, que iremos comiendo a lo largo de este invierno.
Al finalizar la extracción las lavamos y en cuanto salga el sol de seguido, tengo intención de tenerlas unas horas tendidas, secándose al sol. Veremos si con ello ayudo a que su conservación sea mejor. Por ello separaremos todas aquellas que tengan alguna lesión en la piel para consumirlas las primeras. ©