Las verduras de las ensaladas del invierno son uno de los cultivos más importantes del huerto de invierno. Se siembran fundamentalmente desde la segunda parte del verano en adelante. Se cuidan a lo largo del otoño, invierno y hasta donde lleguen en la primavera.
En su cultivo resulta esencial atender la humedad de las plantas, ya que para las plantas de hoja el agua es esencial para su crecimiento. Esto, este año, ha resultado irrelevante dado que de forma natural el huerto desde finales de agosto se ha ido regando de forma autónoma a través de las lluvias.
Este año la exuberancia ha sido la tónica general de las plantas. El agua abundante y las temperaturas moderadas han incentivado el crecimiento de las plantas. Esto es un arma de doble filo, genial para el consumo de las verduras que están jugosas y tiernas y un problema si hay un cambio brusco de las temperaturas, pues esas mismas verduras son fundamentalmente agua, que puede helarse con cierta facilidad y dañar las estructuras celulares de las plantas.
Este año me he retrasado en proteger las plantas, dado lo mal que les sentó a las judías el tenerlas bajo plástico. De momento he montado la estructura del túnel y estos días en que ha habido helada he cubierto las plantas, pero luego las sigo destapando.
Este año tengo más variedad que otros años con la verdura de hoja: Dos tipos de lechuga, tres tipos de achicoria, cuatro tipos de escarola. El tener distintos tipos de hojas permite hacer combinaciones diferentes cada día, empleando básicamente lo mismo.
También las tengo sembradas de fechas diferentes, para ver si de ese modo no se vienen todas al mismo tiempo, cuando se acogollan o más adelante cuando les sale el tallo.
Las lechugas son lo más delicado de cara a la helada, pero las escarolas también se pueden encontrar con sus tallos dañados, lo que hace que algunas zonas adquieran tonos castaño. Lo más resistente si cabe son las achicorias, algunas de ellas se acogollarán cuando llegue el frío y se blanqueará su cogollo, otras tomarán un tono rojizo. Las achicorias van desde la blanca de Milán, la achicoria roja y la achicoria Diente de León nueva este año en el huerto.
Lechugas, escarolas, achicorias resultan imprescindibles en las ensaladas de toda esta temporada.©