Red sobre los albaricoques

Este año como ya os indiqué montamos un túnel-invernadero para los albérchigos, cansados de que siempre se helasen. Las flores cuajaron bastantes, pero luego muchos de los frutos cuajados se cayeron. Me imagino que tenemos que aprender mucho más sobre todo ello. Aun así y todo los albérchigos han prosperado y están con fruta que está comenzando a madurar.

Al llegar los primeros calores fuertes a comienzos de junio les retiramos el plástico, pensando que sería un año del estilo de los anteriores, con junios cálidos. Quedaron expuestos al sol y al aire.

Este año será la primera vez que habrá fruta suficiente para que podamos valorar si estas variedades compradas en Valencia ya hace unos años, merecen la pena. Son el albaricoque Canino y el Tadeo. Ambos van ya madurando, aunque uno de ellos más adelantado que el otro, pienso que el Canino, pues el Tadeo dicen que es más tardío.

Pero al comenzar a amarillear la fruta los pájaros no han podido resistir la tentación y han comenzado a picotear alguno de los frutos que iban más blandos. Como no hemos llegado hasta aquí para dejar que eso siguiese adelante, después del trabajo y atenciones que nos ha dado el túnel, le colocamos una red al tramo de espaldera donde están ambos frutales.

El tener el armazón del túnel ha sido la base empleada para colocar la red. De ese modo su tendido ha sido rápido. Y he mantenido las puertas del mismo que me sirven para cerrar uno de los frontales. El resto lo cerré con otra red desde dentro.

Rebajamos también un poco las ramas de los arboles, para que corriese el aire entre la fruta. Ahora estamos pendientes de cómo van cogiendo color y no hemos podido resistir la tentación de probar los frutos picoteados, eran un riesgo para que se pudrieran después de las lluvias.©

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.