Desde comienzos del invierno hemos estado realizando en el huerto diferentes hoyos para el trasplante de algunos frutales. Estos hoyos se han cavado bastante antes de la realización del trasplante. El hacerlos con tiempo suficiente se le permite a la tierra meteorizarse por la acción de la helada y del agua sobre ella, volviéndose la zona más permeable y suelta.
El tamaño necesario para el hoyo depende del tamaño del plantón que vamos a colocar, pero de media, hoyos de 0,50 cm de anchura, por 0,60-0,70 cm de profundidad, pueden ser adecuados y suficientes, aunque cada suelo puede necesitar unas pautas diferentes.
Con la realización de un hoyo para el frutal lo que pretendemos es crear una especie de contenedor natural donde colocaremos el árbol junto a los nutrientes que este necesita. De este modo el árbol puede tomar de forma fácil los nutrientes que necesita, en los momentos iniciales de su desarrollo,
El hoyo debe tener el espacio adecuado y suficiente para que el frutal desarrolle en el mismo las raíces necesarias para su desarrollo. Este hoyo es especialmente importante si el suelo resulta pesado y duro.
Este tipo de suelo resulta difícil para el desarrollo del árbol, al no poder penetrar y romper con sus raíces el mismo. En él, el frutal se encuentra aislado y encajonado en un pequeño espacio; Motivo por el cual, en los terrenos pesados, el hoyo abierto debe ser grande, y dejarlos durante bastante tiempo abiertos para que se meteorizen mejor.
La base del hoyo es siempre conveniente rellenarla con parte del material removido, acompañando con el tipo de abono que vayamos a colocar. Es importante colocar abonos que estén bien descompuestos en contacto con las raíces desnudas del plantón que queremos poner.
En nuestro caso emplearemos el humus de lombriz que ayuda especialmente en el proceso de enraizamiento por la existencia en el mismo de hormonas naturales que refuerzan el proceso, pudiéndose poner directamente en contacto con las mismas. ©
Buena idea la de dejarlos abiertos un tiempo para airear la tierra.
Si además viene de lluvias la acción es muy intensa, pero también les sienta bien la helada. Un saludo
Interesante lo que comentas lo de hacer el hoyo tiempo atrás.Nosotros vamos a lo valiente y lo hacemos cuando los vamos a sembrar y hemos tenido suerte pero para el futuro me gustaría hacer lo que dices.
Bssss
El hacer los hoyos es una de las tareas que se puede preparar a lo largo del invierno con comodidad, para luego realizar las trasplantes en primavera. Un saludo
A mi me entra siempre una duda con lo de dejarlo abierto… si se oxigena y entra el sol tengo entendido que mueren varios microorganismo del suelo (lo que ocurre con la labranza), con lo que se pierde fertilidad. Tal vez estaría bien rellenarlos con paja o algo hasta que se planten, pero claro, es más curro…
Es una idea Theegood, miraré a probar y ver como resulta. De hecho lo realizé en el caso de uno de los hoyos,donde coloqué unas varas para ver si prendían y al lado dejé el hoyo para poner un albérchigo.Ccubrí de paja, para que el hielo no me dañase la estructura de los tallos que planté.
Voy a probar también una zona para cultivar sin voltear la tierra, auque si pretendo arrancar hierbas. Me ha parecido muy interesante tu blog, ya lo curiosearé con tiempo. Un saludo